Cómo explicar lo del embarazo a nuestros hijos nativos digitales

Me acaba de llegar por mail y no puedo dejar de aderezarlo y compartirlo, así sin discutir ni nada.

Las abejas, las flores, la semillita, la cigüeña, todo eso está fuera de onda.

Esta es la explicación moderna y tecnológica que tus hijos, nativos digitales, están preparados para entender. Aprendéosla porque la preguntita está a punto de caer:

  - Papá, ¿cómo nací yo?

- Muy bien hijo, algún día debíamos hablar de esto, así que te voy a explicar lo que debes saber:

Un día, papá y mamá se encontraron en Facebook y se hicieron amigos.

Papá, que siempre ha sido más conservador, le mando a mamá un e-mail para vernos en un cyber.
Descubrimos que teníamos muchos bytes en común y nos entendíamos muy bien.Compartimos páginas y nos etiquetamos en fotos mutuamente. ¡Y hasta teníamos los mismos grupos en Spotify!
Cuando no estábamos frente al laptop, chateábamos por WhatsApp.

Y así nos fuimos enamorando hasta que cierto día decidimos hacer un test de afinidad online. La suerte estaba echada, ¡casi un 85% de compatibilidad! Lo publicamos en nuestros muros consiguiendo un huevo de likes y hasta nos felicitaron por los resultados en Twitter. Todos nos animaron, hasta gente que no conocíamos de nada, así que parecía claro, era el momento de dar el paso y compartir nuestros archivos.

La verdad es que el paso decidió darlo mamá, lo leí en un post en su blog a los pocos días, por lo que a la primera ocasión que tuve, la cogí de la mano ... nos metimos disimuladamente en el baño, y papá introdujo su Pendrive en el puerto USB de mamá.

Cuando empezaron a descargarse los archivos, nos dimos cuenta que con el follón de hacernos fotos para Pinterest y Tumblr nos habíamos olvidado del software de seguridad y que no teníamos Firewall ni nada.

Ya era muy tarde para cancelar la descarga e imposible borrar  los archivos. Y como nunca hemos sido amigos del CTRL+ALT+SUP, a los nueve meses .... 

... ¡Apareció el VIRUS!

Eso si, fuimos trendingtopic durante todo el día, y fuiste foto de portada en la bio de mamá casi 2 años, el amor es lo que tiene.

La manzanita y el orgullo patrio

De nuevo "Lo Discutimos" o no, y es que no es para más ni para menos.

Antecedentes personales necesarios para la lectura de este post, para que nadie dude de la objetividad de MI postura, por si alguno ha llegado hasta aquí sin conocerme personalmente:

1. Con MI Apple ID hay registrados: iMac, MacBook, iPad, iPod, iPhone y iTv.
2. La mejor experiencia de compra que he tenido nunca (y de esto sé un poquito) ha sido en una Apple Store, gustito del bueno.
3. Soy un iFan tardío y postmoderno, llegué al mundillo de la manzanita por pura envidia, marketing y "trendy-coolismo". Por supuesto, Windows y todo lo que se le parezca produce en MI ciertas sensaciones pleistocénicas, tengo una reputación que mantener.
4. Soy español, muy español, retorcida y recalcitrántemente español. ¡Vivas-Paña! (Nax, no vayas a ir a la SGAE que te conozco, eso lo aprendí en la mili)
5. Entiendo más bien poco de vinos, aunque hay más de 1.000 en Twitter que ME siguen pensando que si. Y eso que creo que nunca he probado el Tio Pepe. Que quede entre nosotros.
6. Cada vez, y con el permiso de Aguirre, ME gustan más las explicaciones del profesor Braun, y sobre todo su saludo de buenos días: "¡Buenos días! #ElLiberalismoNoEsPecado"

Y ahora al asunto: La trifulca que supuestamente se está montando con la sustitución del luminoso de Tío Pepe de la Puerta del Sol por la manzana de Apple.

Hace más de un año que se viene, primero rumoreando, y luego hablando de la apertura de una nueva Apple Store en el conocido edificio del madrileño Km. 0.

Entretanto llegaron los andamios, las obras de reforma y las búsquedas de personal para el nuevo megastore. Con los andamios, la retirada del emblemático luminoso de Tío Pepe. Semanas después las primeras reacciones en el universo 2.0

Imagen de http://www.hazelblogynolaguerra.es/

Caray, para que el informativo de A3, que no se entera de nada o si se entera tarda un par de días (o tres, como su propio nombre indica) en hacerlo, esto debe ser gordo. Deformación profesional o santotomasismo al margen, me puse a intentar cuantificar el neonato y más trendyflautista movimiento social del momento. ME maravilla la de tiempo, ilusión y esfuerzo que puede regalar derrochar la gente. Joder si yo tuviera ese tiempo libre ...

Al lío: análisis de hastags y trending topics por allí, fanpages y grupos por allá, una pizquita de blogosfera por aquí y alertas de Google al gusto del consumidor, sin olvidarnos de unas gotitas de Pinterest, que está muy "en Vogue" ... Voilá, ya tengo monitorizada la criatura, a ver que me cuentan sus constantes vitales.

Imagen de http://apuntesauxiliarenfermeria.blogspot.com.es/

Pi ............. pi ............ pi ............. pi ............. pi ............ pi ............. pi ............... pi ............ pi ............. pi............. (etc)

Y poco más.

Vaya bluf, ME esperaba cuentas con decenas de miles de followers, fanpages con cienes y cienes de miles de fans, ¡al menos un trending topic mundial aunque fuera efímero! ¿una pequeñita mención en algún blog con más asiduos que el nuestro? Nasti de plasti. Una castaña, una full.

Algunos buenos intentos absolutamente descoordinados. Grandilocuentes declaraciones de intenciones que ni grandi ni locuentes. Sólo intenciones, y mucho argumento y razonamiento ramplón de bar de barrio a la hora en la que se echa a los que no tienen más que dejarse echar.

ME ha llamado la atención la pobre línea argumental de los pensamientos en los que parece vertebrarse esto que algunos medios de comunicación han venido a denominar corriente de opinión:

Tio Pepe somos todos, Tio Pepe es el símbolo que representa lo mejor de los valores y tradiciones de la sociedad española frente a los intentos de invasión del Tío Sam y sus secuaces. 

Digamos que he exagerado un pelín, pero los tiros van por ahí, no es broma. ¡Caray como está el país! (peor incluso de lo que Rajoy nos cuenta)

En este punto, en lo de que Tío Pepe somos todos, ME ha entrado el descojone, perdone Vd.

No puedo negar que le tengo cariño a la silueta de la botella vestida de corto, como al torito indultado (esto si que no Lo Discutimos) de Osborne, u otros símbolos que en el imaginario común representan a nuestra nación. ME hubiera gustado que fueran otros (y si fuera posible que no estén en manos privadas sino en manos de todos los españoles, de verdad, y que además fueran productivos y .... ), pero son los que son y, oiga, les he cogido cariño.

Pero es que parece que la banda no se entera, hay una cosa que se llama libre mercado, otra parecida (que no igual, léase un poquito a Regalini Walter, sin ir más lejos) que se llama capitalismo .... y frente al idealismo, el ñoñerío y las públicas ganas de distracción, pan y circo ... ganan, por goleada, los dineros.

Imagen de http://eurodolar.finanzas10.com/

Aquí, amig@, o nos invaden los franceses o no hay causa que nos una, ni Gibraltar que nos separe. Nos la ha pelado que Iberia sea inglesa y que nuestra energía la controlen los italianos. ¿Pero qué me estás contando? Pues eso, que o viene Bonaparte o nada. Asín somos.

Para terminar, lo que más me ha sorprendido de todo esto es que todavía nadie ha propuesto abrir una cuenta en la que, mediante aportaciones populares, seamos capaces de ofrecer al propietario del edificio, o a la comunidad de vecinos, el triple de la pasta que Apple va a desembolsar por colocar su manzanita en tó lo arto.

Así se convence al Tío Sam, o al Pepe, o al que se ponga. ¿Hace falta que se lo explique a alguien?

Sea Vd. bienvenid@ al mundo real.

¿Sabes qué? Luminoso de Tio Pepe ................

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No le conocía, pero me hubiera gustado.

Las vueltas que da la vida le hacen a uno ponerse transcendental muy de vez en cuando, al menos en mi caso, y ésta de la que escribo ahora es una de ellas.

¿Alguna vez te has planteado que dirán de ti el día de tu funeral, si es que alguien dice algo?

No sé lo que se dirá en el mío, pero sí tengo una idea de lo que me gustaría que pensaran sobre mi, y también de lo que no. Por lo que me gustaría ser recordado y por lo que no. Por lo que me gustaría haber sido querido y por qué no, por lo que alguno pensará que son los motivos para odiarme. Básicamente creo que lo que me gustaría es haber dejado algún poso en mi entorno que haga que alguien, de vez en cuando, se siga acordando de mi paso por estos lares.

No soy amigo de funerales, entierros ni nada que tenga que ver con la muerte, no sé, no me sientan bien, y no es broma, mi cuerpo lo rechaza sistemáticamente. Cuanto más cercano es el difunto peor me pongo, cólicos, vómitos … un numerito que no soy capaz de controlar, es curioso, buscaré en Wikipedia o fuente igual de fiable si hay bibliografía o precedentes al respecto. Debería hacérmelo ver, aunque como afortunadamente a la gente a la que quiero no le da por morirse muy asiduamente lo llevo bastante bien, hasta que alguno ejerce y entonces lo llevo bastante mal. No sé si es un mecanismo de defensa de mi cuerpo ante algo tan absurdo como morirse, pero es una cosa curiosa, física, irracional.

Hace ya varias semanas acudí a un funeral. El fallecido, el padre de M. No le conocía. Sólo conocía a M. y a su marido. Y a alguno de los amigos de M.

Mi relación con M. data de hace más de 3 lustros, cuando ella era una súperdirectiva y yo el recién llegado al equipo. Mis primeras impresiones de ella no fueron muy buenas, lo reconozco. Muy exigente, analítica hasta la desesperación y una lentitud exasperante a la hora de tomar decisiones. Y fría como el hielo. Así la veía yo por aquel entonces. Afortunadamente no tenía que trabajar con ella directamente. Mi jefa era la que lidiaba con ella de tú a tú.

Unos años después, “carambola organigrámica”, se convirtió en mi jefa directa. Mi fulgurante carrera estaba a punto de irse al traste, pensé. Pero aguanté el tirón, me formé, curré como un trabajador de la empresa privada en una multinacional, comprendí su “rational”, su manera de hacer las cosas, pasamos muchas horas y reuniones juntos, viajamos, me esforzé por estar a la altura, empecé a entender … y poco a poco comprendí lo ciego que había estado y lo mucho que me había equivocado con las primeras impresiones que mi estómago y prejuicios me lanzaron. Cojones, lo buena que es y lo mucho, muchísimo, que aprendí con ella en esa etapa.

Luego nuestras carreras tomaron rumbos diferentes y creo que en parte gracias a eso lo que era una relación estrictamente profesional se fue tornando en más personal, sin la interferencia de los roles de cada uno en la compañía. El hecho de que yo empezara a trabajar con su muy mejor amiga (como diría Mr. Gump) también contribuyó a ello.

Me enteré de la triste noticia de la reciente muerte de su padre en una de las periódicas comidas con ambas, y a la semana siguiente acudí a la misa funeral, para expresar a la familia mi apoyo y respeto, a pesar de no saber de él más que por vagas referencias en conversaciones con M., y todas ellas, he de decir, asombrosamente modestas. M., chapeau.

Todo transcurrió como Dios manda, hasta que llegaron los panegíricos. Es de ley que en ellos, las personas más queridas y cercanas al difunto honren su memoria con palabras de alabanza, amor, gratitud y admiración.

Pero lo que allí ocurrió me dejó maravillado. Y tocado.

Salió el marido de M. a hacer lo propio, siendo orador de reconocido prestigio, y lo hizo, y lo demostró. Demostró lo que el padre de M. era y seguirá siendo en el corazón de los allí presentes. Durante casi veinte minutos salpicados de risas y lágrimas hizo un repaso del hombre, del abuelo, de su familia, del empresario, de su gente, del hombre de bien, del suegro, de su tierra, del valiente, de su proyecto de vida, del hombre hecho a sí mismo. Del padre de M.

Yo cada vez me iba emocionando más y más, admirándole más y más, deseando haber tenido la oportunidad de conocerle y enfadándome cariñosamente con M. por no haberme hablado más de él.

No le conocía, pero me hubiera gustado.

Eso es lo máximo a lo que uno puede aspirar que se piense de él en su propio funeral.

Andaluces, Franco ha muerto

Mire usté, si quiere lo discutimos, pero ME consta, aunque Garzón no haya llegado al final del asunto, que Franco ha muerto.

Notición: Franco ha muerto.

Algunos medios de comunicación hablan de la presunta soberbia intelectual de los que pensamos que la mayoría de los andaluces están aborregados. Lo confieso, ME confieso intelectualmente soberbio, para empezar, salvo disclaimer en contrario.

Para continuar, he de reconocer que no soy un andaluz típico:

•  Nadie me llama ceñorito. Parece lógico, no tengo caracolillo capilar, ni un un cortijo con caballos PRE, ni siquiera me gustan las corridas de toros, como es público y notorio. Pero bueno, no caigamos en demagogia, no todos los andaluces son ceñoritos, por fortuna. Digo, porque no tienen la fortuna suficiente para serlo. Aunque haberlos haylos, ceñoritos sin fortuna, pero con mucho morro y más deudas.
• No cobro, ni he cobrado, ninguna subvención, ni tan siquiera el PER, flipe usté. OK, ya sabemos que no soy un ceñorito, y que además ya hay una buena parte de la población andaluza que me considera gilipollas. No por las cosas que digo, no tergiversemos, es por no pillar cacho for free de los presupuestos de la Junta.
• Trabajo. Si, trabajo un huevo de horas al día. Con objetivos, y hasta se evalúa mi rendimiento. Coñó, estoy pensando que es que igual soy alemán, o asín. Y ya si te cuento que trabajo en una empresa privada (si si, sin nada que ver con el ayuntamiento, la mancomunidad de regantes, la empresa mixta de rebujitos ni con la Junta que nos arrejunta). A-CO-JO-NAN-TE.
• La prueba del algodón no la paso, me revienta que los camaremos repregunten mi petición: Por favor, una de papas y una cervecita. ¿Una de papas y una cervecita?. No una hamburguesa con beicon, y un JB con Red Bull, imbécil, desmentao, meapilas, anormal, tuercebotas, ¿me quieres explicar para qué coño me repreguntas, es que tengo cara de tener tiempo que perder contigo, tontolculo?. Es que no puedo, y eso, eso sólo pasa en Andalucía.

Típicos andaluces.

Querido lector (no, no voy a poner la soplapollez de querido lector y querida lectora), no voy a insultar tu inteligencia (o inteligencio si eres chico), que hoy he venido a despotricar contra otros, a ti ya te tocará otro día. Efectiva y presuntamente, no soy andaluz (confiésalo, no te has dado cuenta hasta la prueba del algodón, ¿eh?).

Esto es lo que ME preocupa.

Hay mucha gente que piensa que los andaluces son así, tal cual se deduce de estos buletpoints. Y por el sentido de su voto anteayer podría confirmarse la teoría, independientemente de la soberbia intelectual de cada uno. 

Pero YO quiero creer que no, que la mayoría de los andaluces son honrados y trabajadores, emprendedores e innovadores, que valoran la cultura del esfuerzo sin que ello les suponga renunciar al cashondeo y a saber disfrutar de la vida como sólo ellos saben hacer.

Lo que pasa es que muchos de ellos (probablemente por falta de tiempo o por lo reciente del asunto) todavía no se han enterado de que Franco ha muerto. Ya se enterarán.

Confío en que para entonces no hayamos vendido Al-Andalus (الأندلس) a algún emir para poder afrontar tantos años de despiporre.


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